En las actas del RBA, se observó que la inflación en Australia se mantuvo alta y que el mercado laboral ajustado indicaba el potencial de aumentos de precios y salarios por encima del promedio. A pesar de esto, la junta decidió mantener la tasa de efectivo sin cambios en 4.1 por ciento, considerando el endurecimiento significativo de la política monetaria que ya se había llevado a cabo y la incertidumbre que rodea el panorama económico. El directorio reconoció la necesidad de un mayor endurecimiento en el futuro para llevar la inflación de regreso a la meta, pero reevaluaría la situación en la reunión de agosto con base en datos adicionales y pronósticos actualizados. El RBA mantiene su compromiso de devolver la inflación al objetivo en un plazo razonable.
Información clave:
- Se discutieron dos opciones: aumentar la tasa de efectivo en otros 25 puntos básicos o mantenerla sin cambios.
- Se favoreció mantener la tasa de efectivo sin cambios debido al ajuste reciente, la postura restrictiva y la curva de rendimiento invertida.
- La incertidumbre en torno a la perspectiva y los efectos del endurecimiento anterior justificaron una reevaluación en la reunión de agosto.
- El crecimiento económico australiano se desaceleró, lo que refleja el impacto de las tasas de interés más altas y la alta inflación.
- Las condiciones del mercado laboral se mantuvieron difíciles, con un sólido crecimiento del empleo y una baja capacidad ociosa.
- La inflación se mantuvo alta, aunque había disminuido desde su punto máximo. Los indicadores oportunos sugirieron una moderación gradual de la inflación. La inflación de los precios de los servicios se mantuvo elevada, como reflejo del fuerte crecimiento de los costes laborales unitarios.
- Las expectativas del mercado para futuras subidas de tipos aumentaron.
- La recuperación económica de China perdió impulso, con indicadores económicos más débiles y un mayor debilitamiento del mercado inmobiliario.
El AUDUSD experimentó un movimiento mixto en respuesta a las actas de la reunión del RBA. Antes del lanzamiento, el par subió inicialmente a un máximo de 0,683 $, pero luego cayó a un mínimo previo a las actas en 0,680 $. Actualmente, el AUDUSD ha subido un 0,14% a 0,682 $. El par enfrenta una resistencia de 0,689 $, mientras que se espera soporte en el nivel de retroceso principal de 0,679 $. El tono cauteloso del RBA y la mención de un posible endurecimiento futuro para controlar la inflación podrían influir en el sentimiento del mercado hacia el dólar australiano.
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